domingo, 27 de febrero de 2011

Honores a los caídos el 27 de febrero del año 2004



El 27 de febrero del año 2004, sectores democráticos de la sociedad marchaban rumbo al Teresa Carreño a entregar una carta al “Grupo de los 15” *.  Ese evento tenía algo particular: la presencia de un “asesino de gentes”, el dictador Mugabe. A la altura de la sede de Cantv en Colegio de Ingenieros, fue recibida por militares fuertemente armados, y con una orden clara y simple: “reprimir”.
Ese día, los “civiles del oficialismo” desaparecieron de la ciudad. La represión tenía un solo color: “el verde oliva”. Una vez que los “militares” reprimieron brutalmente la marcha, distintos grupos de ella se repartieron por la zona. Fue bloqueda la autopista Francisco de Miranda, así como la Libertador y zonas adyacentes a Plaza Venezuela. Leímos con estupor, como funcionarios de la DISIP con fusiles de mira telescópica hicieron acto de presencia en las cercanías de la entrada a la UCV, e hirieron al menos a 4 personas, entre las que había personas de la tercera edad. Fue un día muy largo, que dio inicio a una protesta que duró casi 7 días.

La revuelta iniciada ese histórico viernes, se extendió a diversas partes del país.  Según comentarios de fuentes cercanas al alto mando, “Miraflores” estaba exigiendo “resultados rápidos”, la revuelta tenía que acabarse. Las “caras tensas” de los generales revelaban que si esa protesta hubiera durado unos días más, se podía haber producido el mismo efecto del 11A: “el rechazo de militares a seguir reprimiendo al Pueblo”.
Para documentarse, pueden consultar los siguientes artículos: 
Nelson Rivera: “Saña y desproporción. Chávez ya tiene su 27 de Febrero”.
Adolfo Tailhardat:  “La situación explosiva de Venezuela”.
También, pueden consultar el “informe preliminar” de la Defensoría del Pueblo, que no está firmado, y que aparece en el siguiente enlace:
Del documento del Dr. Taylhardat extraemos, de la página 3, el siguiente balance de esa semana:  “….. El balance de la agresión por parte de la fuerza represiva de Chávez contra los manifestantes indefensos que marcharon el pasado 27 de febrero arroja las siguientes cifras:  261 personas agredidas o maltratadas, 379 personas detenidas ilegalmente, 14 personas fallecidas, de las cuales 9 fueron sometidas a torturas, 25 periodistas atacados, 3 de los cuales fueron detenidos ilegalmente. A pesar de la represión los venezolanos que firmamos continuamos decididos a defender nuestras firmas por cualquier medio pacífico, pero  el gobierno sigue empeñado en atornillarse en el poder a cualquier costo, incluso a costa de pérdidas de vidas humanas como ocurrió el pasado viernes 27 de febrero y a costa de llevar al país al desastre”.
El informe de Nelson Rivera, muestra una cronología detallada de esos días de “efervescencia ciudadana”.
Varias de las muertes fueron muy comentadas. Evangelina Carrizo y José Vilas murieron de tiros por la espalda. Eran balas de FAL, el arma militar de excelencia para aquel entonces. En Plaza Altamira, en la azotea de la Torre Británica, militares dispararon con armas automáticas y fusiles con mira telescópica. En la zona muere, de bala de arma larga, el estudiante de 21 años Yurmi Suárez.
En los tres informes se evidencia el sello del 27F2004: violencia militar, torturas y muertes.
Pueblo que no recuerda no tiene Futuro.  Pueblo que no honra a sus “caídos” no tiene dignidad. El 27F2004 es otro paso doloroso de los civiles en la ruta de la Libertad.

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