En medio de una sabrosa cola en la autopista, y escuchando el importante anuncio de las fechas tentativas para las Primarias, recordé una entrevista en la que trataban la posibilidad de que el Gobierno adelantara la elección presidencial y la separara de la elección de Alcaldes y Gobernadores. Entonces me vino a la cabeza la película del momento: las interpelaciones en la Asamblea Nacional.
En primer lugar, el cambio de fecha en la elección de la Asamblea Nacional fue aceptado por la gente y los dirigentes sin la exigencia de la instalación inmediata de los diputados electos.
En segundo lugar, el adelanto de elecciones vino “condimentado con el pequeño truco” de los circuitos electorales, que también fue pasado por alto por la sociedad democrática.
Las consecuencias de ambas cosas están a la vista: el Gobierno de los “Militares Buenos” se siente sobrado y tentado a seguir jugando duro. La asamblea “saliente” aprobó en 3 meses lo que necesitaban para avanzar tanto en la destrucción de la organización administrativa del Estado (juntas parroquiales, alcaldías, gobernaciones), como en el control de cuantos “espacios” consideran necesarios para su supervivencia. El ”Show” de las interpelaciones, digno del concurso ministerial “El Pinocho de Oro”, es una muestra de lo que sucede cuando se controlan los medios a a través de largas cadenas nacionales, acompañadas de “Música”, “burlas calculadas” y falta de respuestas concretas. La imposibilidad de que prospere un “voto de censura”, o que alguna de las comisiones importantes realice una investigación en profundidad, o más sencillo aún, la incapacidad de contratar una “auditoría” independiente que revise en detalle los estados financieros de PDVSA, es un hecho, que no solamente se mantendrá en lo que queda al 2012, sino que continuará hasta el 2016, salvo que un “proceso de presión popular” adelante las elecciones de diputados al 2013.
Ahora bien, la elección presidencial tiene la misma posibilidad. Por supuesto, también encierra un gran riesgo, pero sin duda alguna el Gobierno de los “Militares Buenos” lo estudiará con sus “salas situacionales”.
El escenario “Se adelanta la elección Presidencial” está basado en “maximizar” la probabilidad de triunfo de su “veintiúnico candidato”. “Adelantar o mantener la fecha” será la variable en estudio. Si deciden adelantar, el discurso volverá a centrarse en lo necesario que resulta el nuevo “Poder Comunal” para el desarrollo del Socialismo del Siglo 21.
En caso de que el Militar Presidente gane, en el período previo a las elecciones de Gobernadores y Alcaldes, pondrán a todas las gobernaciones y alcaldías a transferir las competencias y recursos al “poder comunal”, e incluso podrá nacer un nuevo planteamiento sobre las elecciones de gobernadores y alcaldes, que podría ir hasta su sustitución por la nueva geometría del poder comunal. Y disfrutarán de condiciones favorables para dar la batalla comunicacional. Y lo más grave aún, esto lo podrán hacer con el aval de la actual Asamblea Nacional, el TSJ, el CNE y la Contraloría General.
Por supuesto, si el Militar Presidente pierde, el efecto dominó sería muy peligroso para las cúpulas de la 5ta R, tanto la principal que es la militar, como las de las distintas instancias donde ejercen el control real.
La pregunta, por tanto, para la sociedad democrática y su liderazgo es la de siempre: ¿cómo desarrollar una ofensiva que obligue al Gobierno de los “Militares Buenos” a no intentar jugar a un escenario de esta naturaleza?
Un primer paso importante en esta dirección, es el que ya se ha comentado hasta la saciedad: dar la pelea por la anulación de las leyes ilegalmente aprobadas, incluida la aberrante Ley Habilitante.
Una segunda acción, es el de continuar desnudando el carácter militar del gobierno actual. Hasta ahora, a los militares les ha resultado muy bueno que todas las culpas se le achaquen a un solo “compañero de armas”. Es hora de que se sientan señalados por la gente.
Una tercera línea de acción, sería la de “victorias parciales”. Por ejemplo, una podría ser la de “liberar” al Canal 8 (VTV) y a la RNV. Esa batalla, que pareciera “pequeña”, es fundamental en el año en curso. Y ello sería sencillo si hay voluntad política de diputados, movimientos, y de la gente. Se debería empezar por solicitar la interpelación al ministro “Rizarra”. Pero previamente, hacer movilizaciones a las sedes del canal y de la radio, y en forma pacífica entregar una solicitud de creación de programas bajo la dirección de comunicadores no alineados con el gobierno central. A partir de allí, movilización, interpelación, movilización, hasta conseguir que el 50% de los programas sean “independientes”. Eso indudablemente marcaría un “antes” y “después”, pues no está centrado en la figura presidencial, y es un acto claramente democratizador del espectro público controlado totalmente por el gobierno.
Para finalizar, no podemos dejar de mencionar los sucesos especiales que ocurren hoy en la famosa “aldea global”. Es posible que al Poder Central se le escapen pequeños detalles como la posible “implosión” del subimperio “ALBA”. El proceso del Medio Oriente, que entre otras cosas, todavía no ha definido su norte ideológico, o político religioso, tiene algo muy positivo, al menos por ahora, y es que los manifestantes tratan de usar Facebook y Twitter y no de estar quemando las banderas de occidente. Eso podría ser una clara señal de “vientos de cambio no esperados”.
El efecto de la gente en la calle puede llegar también a la esfera del ALBA. Este escenario, aunque considerado de baja probabilidad, debe ser considerado por la MUD, por la sencilla razón, de que puede ocurrir otro 11A, ó 27 de febrero del 2004, fechas en las que el gobierno, por la presión popular, entregó o estuvo a punto de “entregar el poder”. Si volvemos a tener un 11A no podemos darnos el “lujo” de otro 12A. Porque, ¿se imaginan cuánto hubiera avanzado el país sin el 12A?
Señores del Gobierno de los “Militares Buenos”, abran los ojos, porque el “Cambio no descansa”, y como que está volviendo a dar vueltas por los países del ALBA.
En segundo lugar, el adelanto de elecciones vino “condimentado con el pequeño truco” de los circuitos electorales, que también fue pasado por alto por la sociedad democrática.
Las consecuencias de ambas cosas están a la vista: el Gobierno de los “Militares Buenos” se siente sobrado y tentado a seguir jugando duro. La asamblea “saliente” aprobó en 3 meses lo que necesitaban para avanzar tanto en la destrucción de la organización administrativa del Estado (juntas parroquiales, alcaldías, gobernaciones), como en el control de cuantos “espacios” consideran necesarios para su supervivencia. El ”Show” de las interpelaciones, digno del concurso ministerial “El Pinocho de Oro”, es una muestra de lo que sucede cuando se controlan los medios a a través de largas cadenas nacionales, acompañadas de “Música”, “burlas calculadas” y falta de respuestas concretas. La imposibilidad de que prospere un “voto de censura”, o que alguna de las comisiones importantes realice una investigación en profundidad, o más sencillo aún, la incapacidad de contratar una “auditoría” independiente que revise en detalle los estados financieros de PDVSA, es un hecho, que no solamente se mantendrá en lo que queda al 2012, sino que continuará hasta el 2016, salvo que un “proceso de presión popular” adelante las elecciones de diputados al 2013.
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