viernes, 14 de diciembre de 2012

¿La transición tocando las puertas del CNE?

Ignacio Gainzarain
  
@igaztelu       www.gainzaedmat.blogspot.com

Cuentan que adecos y copeyanos están trabajando a toda velocidad para entrar al CNE y cerrarle el "camino" a PJ. 

La actual presidenta sale del Órgano Electoral este mes, y seguido le tocará a Don Vicente Díaz. Se dice que el Hijo de Bolívar se comprometió además en pedirle la renuncia a los otros tres miembros, aunque todo indica que apunta más a la rectora Sandra Oblitas. 

Al parecer, antes de irse, el personaje del efímero poder se reunió con Henri Ramos Allup, Eduardo Fernández y Julio Borges. Reuniones por separado. Entre uno de sus compromisos estaba el de abrir las compuertas del CNE. Entre los nombres que se escuchan que apoya AD, está el del ex funcionario del CNE, Felix Arroyo. Para aquellas personas que estén interesadas en conocer sobre el personaje, pueden buscar el informe Guácharo (http://www.box.com/shared/82dijiiu17).


A pesar del aparatoso aterrizaje del Comando Venezuela, se dice que empezó a calentar los motores para la inminente lucha por la candidatura de la oposición tradicional. Debemos suponer, que PJ estará postulando nombres de algunos de los "técnicos" que santificaron el actual sistema electoral. 

Lo cierto es, que para iniciar un proceso de democratización del Poder Electoral habrá que ejercer presión para tener una nueva directiva que responda a una representación honorable de personas debidamente acreditadas y de clara independencia en lo político partidista.

Ese principio debería ser algo así como el 2-2-1. Dos personas de la oposición, dos del oficialismo y uno elegido de común consenso entre los 4 designados. 

Entonces el problema del lado de la oposición se reduciría a elegir dos personas adecuadas a través de un proceso de discusión transparente. Porque permitir que los técnicos de la MUD que se implicaron en la santificación del sistema electoral (y en algunos negocios poco transparentes) puedan ser candidatos a esos puestos, es como poner a zamuro a cuidar carne. 

El reto de la sociedad democrática en enero será el de tomar el toro por los cachos. Debe implicarse de una vez en la discusión de fondo: las Elecciones Auténticas. Y un  paso fundamental en ese sentido es el de exigir un CNE equilibrado, competente, imparcial, y audaz. Y una actitud indispensable será la de exigir que las organizaciones de defensa de los derechos de los electores participen activamente en esa elección.

Ahora bien, soy de los que piensan que el Régimen va a volver a jugar duro este 16D. El por qué es muy sencillo: mientras más posiciones de poder tenga, menos concesiones tiene que hacer. El fraude electrónico en la elección del 7O está en el orden del siete al once por ciento (7% al 11%). Próximamente se hará público estudio estadístico relacionado con los resultados de ese evento electoral. Por tanto, al CNE le resultará mucho más fácil en esta elección, en la que la defensa del voto será mucho más débil que en la presidencial.

Por otro lado, creo que desde el primero de enero hay que comunicarle al mundo político de lado y lado, que si convocan a elecciones presidenciales antes de abril, se lanzará una agresiva campaña por la abstención. No podemos permitir que en enero pretendan que están dadas las condiciones para ir a un evento electoral en el marco de las Elecciones Auténticas (ver "Condiciones mínimas para ir a votar en el 2013").

No debemos permitir que este proceso de transición que ya está tocando las puertas del CNE sea urdido a escondidas, de la mano de partidos que no le están hablando claro al país.

Cambiar el CNE bajo la fórmula 2-2-1 es una condición sine qua non para una verdadera transición política. El como hacerlo es materia urgente para el mismo mes de enero.







  
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