Usted dijo que no es responsable de las 150.000 muertes por homicidios en estos trágicos 12 años, y eso es verdad. Pero le explicaré a Usted y a su gabinete histórico, por qué SI SON RESPONSABLES de la gran mayoría de las 150.000 muertes. El argumento es de fácil comprensión para cualquiera que haya pasado por la Misión Robinson. Tres consideraciones para empezar.
En primer lugar, gracias por reconocer que hay cerca de 150.000 muertos por homicidios en sus 12 años de gestión: ¡toda una guerra verdad!. En segundo lugar, recuerda Usted “las cifras oficiales” de homicidios en los años 1994, 1995, 1996, 1997, 1998 (gobierno Caldera II)? Si no lo recuerda, aquí tiene el cuadro:
En tercer lugar, recuerda Usted cuál fue una de las grandes razones por las que la mayoría le dio el voto en el 98? Por si acaso no lo recuerda se lo escribo facilito, al estilo misión Robinson: “el pueblo llano y la clase media, cansados de la decadencia del Pacto de Punto Fijo, y del desorden reinante, vieron en los militares de los Golpes de 1992 a los patriotas que sí trabajarían por poner orden, y entre otras cosas por acabar con el drama de la inseguridad y la corrupción del sistema judicial”. Así de sencillo.
Entonces, si Usted prometió que iba a poner orden, que iba a acabar con las tribus judiciales y la impunidad, y que crearía oportunidades para que los jóvenes salieran del mundo de la violencia, la droga, el vicio y la ociosidad, ¿cómo es que las “cifras oficiales” pasaron de 39.484 homicidios en el período 1988-1998 (once años), a 118.541 homicidios, en el mismo plazo del tiempo, que va desde 1999 a 2009?.
Entonces, ¿cuál es la cifra de personas asesinadas por la que hay que RESPONSABILIZAR a su gestión? Muy sencillo, y de nuevo a lo Misión Robinson, le damos el criterio y los numeritos: “Si el Gobierno que Usted preside hubiera sido serio en esta materia, lo mínimo que debía haber ocurrido es que la cifra del período de once años anterior hubiera bajado al menos en un 30% (otros países vecinos la bajaron en porcentajes superiores). Es decir, el acumulado de su período debería haber sido menor a 27.639 homicidios.
Entonces Sr. Presidente, como la “cifra oficial” de muertes por homicidio en estos trágicos 11 años (1999-2009) fue de 118.451 aproximadamente, la diferencia entre el cálculo anterior y la realidad es de 90.902 homicidios.
Conclusión, Usted y su gabinete histórico son responsables de 90.902 homicidios, primero, porque recibieron la misión del pueblo llano de poner orden; y segundo, porque tuvieron todo a su alcance (muchísimo dinero, armas, soldados, milicianos) para cambiar el curso de la guerra social que hay en el país.
Un gobierno que no se preocupa por la vida de la gente, debe ser juzgado por la guerra social que permite desarrollarse en el país. Tocará a los abogados expertos en derechos humanos, si como lo leyó, en derechos humanos porque la vida es el principal derecho humano, definir las bases para la tipificación de este delito de L.H. (no bajar las cifras de homicidios). Los gobiernos responsables desarrollan políticas públicas para garantizar la VIDA. Porque son dos, o su gobierno auspició el auge del delito, o pecó por omisión (incapacidad, desinterés,….). Y eso los hace responsables.
Reconozca su pésima gestión en garantizar el principal derecho de los seres humano, y defienda la VIDA de los venezolanos con acciones firmes. Están a tiempo todavía, porque a la fecha no se han tipificado este tipo de delitos de L.H..
Y para finalizar Señor Presidente, una primera reflexión sobre el papel central de la Fuerza Armada Nacional: acabar con la guerra social que hoy destruye familias en el País, fundamentalmente en las urbanizaciones pobres, donde están la mayoría de los muertos por homicidios. Si Usted no le ordena eso a la Fuerza Armada, le tocará hacerlo al Gobierno que le suceda en el 2013. La segunda, para Fuerza Armada Nacional: Ustedes saben muy bien, que la gente sabe perfectamente bien, que ustedes son los responsables de la seguridad nacional y de garantizar el derecho a la vida, tal y como lo consagra la Constitución Nacional, porque ustedes son los que tienen el monopolio legal del manejo de las armas y la guerra. Ustedes tienen la inmensa responsabilidad de acabar con la tragedia actual, resumida en la triste frase popular: “En Venezuela la Vida no vale nada”. Le dejo un lema Presidente, a usted que le encanta hablar bonito: “MANO DURA POR LA VIDA Y MANO ABIERTA A LOS QUE DESEEN SALIR DE LA GUERRA SOCIAL.”
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